¡Feliz martes, escritor! ¿Cómo va todo?
¿Ya tienes disfraz para este Halloween? Recuerda que estamos a menos de una semana del día más estremecedor del año. Si no te das prisa, te tocará improvisar, dibujarte un par de cicatrices de dudosa credibilidad e intentar pegarte a duras penas un hacha de juguete en la cabeza. Ya sabes que el arte de la escritura y sus grandes representantes siempre han estado estrechamente vinculados al misterio, por lo que, lo creas o no, ésta es una fecha importante para el mundo de las letras. Las musas más aterradoras están deseando salir en busca de alguna que otra mente dispuesta a llenarse de ideas, ¿vas a dejar que te pillen desprevenido/a?
Hoy estamos aquí para aprovechar al máximo el potencial creativo de estas fechas y celebrar Halloween como todo buen escritor debería hacerlo: escribiendo un gran relato de terror. Para ayudarte con esta interesante tarea, hemos reunido 4 fantásticas historias de 4 autores reconocidos que constituyen el ejemplo perfecto de que son muchas las opciones y alternativas cuando se trata de introducir en un texto elementos que confieran al mismo un halo de suspense e inquietud. Te invitamos a que los descubras, debatas con nosotros su contenido y te animes a utilizarlos como punto de apoyo para tu propia historia. ¿Aceptas?
“El corazón delator”, Edgar Allan Poe
Si alguien puede enseñarnos cómo componer un relato de terror de forma sublime ese es sin duda Edgar Allan Poe. Hemos decidido darte la bienvenida a esta recopilación con uno de sus cuentos más famosos, “El corazón delator”. La historia narra las confesiones de un asesino, que describe minuciosamente cada una de sus impresiones y actos hasta que comete el delito. Mas allá de su argumento y del papel tan interesante que juega el concepto de locura en él, hemos elegido este texto por su formidable uso del monologo interior, un recurso que Poe sabe utilizar a su favor a la hora de escribir en clave de terror, y que puedes tomar como modelo de cara a cambiar el enfoque de tus futuros textos.
“¡Es cierto! Siempre he sido nervioso, muy nervioso, terriblemente nervioso. ¿Pero por qué afirman ustedes que estoy loco? La enfermedad había agudizado mis sentidos, en vez de destruirlos o embotarlos. Y mi oído era el más agudo de todos. Oía todo lo que puede oírse en la tierra y en el cielo. Muchas cosas oí en el infierno. ¿Cómo puedo estar loco, entonces? Escuchen… y observen con cuánta cordura, con cuánta tranquilidad les cuento mi historia…” Leer más.
“La última noche del mundo”, Ray Bradbury
Aunque Ray Bradbury sea mundialmente conocido por obras como “Crónicas marcianas” y “Fahrenheit 451″, hoy queremos hablarte de su faceta como autor de relatos y presentarte uno que nos ha dejado muy impresionados. Se trata de “La última noche del mundo”. Hemos escogido exponerlo en segundo lugar para acentuar el enorme contraste con el cuento de Poe y reforzar la idea que queremos demostrar con este post: que hay mil y una formas de utilizar el suspense para provocar el mismo grado de desasosiego en el lector. Observa como este texto introduce una idea estremecedora desde la más absoluta calma, en un ambiente cotidiano, con un diálogo entre dos personajes que bien podríamos ser cualquiera de nosotros.
“¿Qué harías si supieras que esta es la última noche del mundo?
—¿Qué haría? ¿Lo dices en serio?
—Sí, en serio.
—No sé. No lo he pensado.
El hombre se sirvió un poco más de café. En el fondo del vestíbulo las niñas jugaban sobre la alfombra con unos cubos de madera, bajo la luz de las lámparas verdes. En el aire de la tarde había un suave y limpio olor a café tostado.
—Bueno, será mejor que empieces a pensarlo…” Leer más.
“Buitres”, Franz Kafka
Si has leído “La metamorfosis”, sabrás que la literatura de Franz Kafka puede enseñarte a la perfección cómo construir una atmósfera agobiante y retratar una realidad grotesca con crudeza. El relato que hemos escogido para representar al escritor checo no pertenece estrictamente al género de terror, lo que no supone un impedimento a la hora de conseguir que el texto genere cierta ansiedad en aquel que decide asomarse a él. Nos referimos a “Buitres”, una historia que deja claro que la “fábula” puede ofrecer un formato distinto al suspense pero igualmente satisfactorio.
“Erase un buitre que me picoteaba los pies. Ya había desgarrado los zapatos y las medias y ahora me picoteaba los pies. Siempre tiraba un picotazo, volaba en círculos inquietos alrededor y luego proseguía la obra. Pasó un señor, nos miró un rato y me preguntó por qué toleraba yo al buitre…” Leer más.
“La torre”, H.P. Lovecraft
Sabemos que lo sabías: si se trata de un post sobre cuentos de miedo hay un nombre que no puede faltar, y es el del escritor americano H.P. Lovecraft. Su contribución a la narrativa de terror es tan amplia que nos ha resultado verdaderamente complicado elegir un solo protagonista para cerrar esta entrada. No obstante, y teniendo en cuenta nuestros intereses, nos gustaría despedirnos con “La torre”. En este relato Lovecraft demuestra que es posible construir una leyenda en torno a un lugar, ambientar el espacio e introducir personajes en apenas dos párrafos. Como podrás comprobar si te sumerges en su lectura, el microrrelato también es el escenario perfecto para coquetear con los grandes misterios de la literatura:
“Desde esa esquina se puede ver la torre. Si el testigo abandona por un segundo el ruido de la vida porteña, descubrirá tras las paredes circulares un aquelarre. El eco del mismo lugar que la humanidad resguarda en la penumbra bajo diferentes disfraces. La esencia de los cimientos de construcciones tan antiguas como las pirámides y Stonehenge. Allí se suceden acontecimientos -incluso próximos a lo cotidiano- que atraen a hados y demonios…” Leer más.
Un monólogo interior, un diálogo cotidiano, una fábula y una micro-leyenda. ¿Qué te parece? ¿Hay algún otro autor o relato que quieras aportar como fuente de inspiración? Ya sabes que puedes dejarnos un comentario y contarnos todo lo que quieras. Ahora es tu turno: escoge una de estas cuatro propuestas y escríbenos tu propia versión del miedo en Sttorybox :)